Estabamós muy animadas y le preguntamos a nuestros asesores donde queda el Triunfo, ellos no dijeron que teníamos que investigar, indagamos hasta que un viejo amigo nos dijo que era muy cerca al Caguán, que nos fuéramos en colectivo, así nos fuimos hasta el Caguán, al llegar le preguntamos a la “mona” una anciana que se lo pasa en el parque ayudando a personas como nosotras que llegan un poquito perdidas de la ubicación de las veredas aledañas al Caguán, ella nos dijo que cogiéramos un moto taxi para que nos llevara hasta la escuela el Triunfo y que solo valía 2000 pesitos, ya eran las 6:00 am solo sabíamos que los niños entraban a estudiar a las 7:00 am, todavía teníamos tiempo para llegar.
El sur de ligeros paisajes dormidos en el aire,
Con cuerpos a la sombra de ramas como flores,
O huyendo en un galope de caballos furiosos.
El sur es un desierto que llora mientras canta,
y esa voz no se extingue como pájaro muerto:
Hacia el rió encamina sus deseos amargos,
Abriendo un eco débil que vive lentamente,
En el sur tan distante quiere estar confundido;
la lluvia allí no es mas que una rosa entreabierta;
Su niebla misma ríe risa blanca en el viento;
Su oscuridad, su luz, son bellezas iguales.
Luis Cernuda
Donde el colorido de las flores resaltaba el andar, la carretera un poco dañada pero bueno así nos fuimos acercando a una nueva experiencia que nos enriquecería nuestra formación docente.
¿Con que nos fuimos?
Nos fuimos con dulces para los niños, un poco de ropa, una cobija, una colchoneta, mucha literatura infantil, la platica era muy poquita pero bueno teníamos que hacerla alcanzar para nuestro gastos, y llevamos lo mas importante que era el entusiasmo y las ganas de trabajar, con el objetivo de aprovechar al máximo el potencial de los niños y la comunidad en general.
Al llegar nos encontramos una escuela muy abandona, unas profesoras un poco extrañadas al vernos, debido a que nunca habían ido practicantes, al encontrarnos con los niños la sensación fue de alegría y a la vez de timidez.
Este es un nuevo día,
Para empezar de nuevo,
Para buscar al ángel,
Que nos crecen los sueños.
Para cantar, para reír,
Para volver, a ser feliz.
Este es un nuevo día,
yo dejare el espejo
y tratare de ser,
Por fin un hombre nuevo
Facundo Cabral